Crónicas: NO ES NO.

Esta es una oda al libre albedrío, a decidir y decir NO, a devolverle el significado a esa pequeña palabra que en muchos casos es mal empleada y legitima actos de violencia bajo el supuesto popular de que las mujeres dicen NO cuando quieren decir SI. Pero también es una oda a decir SI y tener la capacidad de intentar, de ir por el objetivo; la determinación de luchar por lo que queremos y creemos, y  en algunos casos la fortaleza para asumir derrotas.

Hoy voy a ser Angélica, voy a contar una historia quizá común, pero no menos importante y voy a contarla  a través de su propia experiencia: Soy Angélica.

Siempre me consideré una mujer ambiciosa, siempre he luchado por lo que he querido con determinación y trabajo, para mí no hay límites, no hay techo, ni siquiera el cielo. Pero hubo un episodio de mi vida que cambió mi manera de ver al mundo, me demostró lo vulnerable que soy, lo fuerte que puedo llegar a ser, lo radical de mi posición, de mis pensamientos y de mis sentimientos en cuanto al respeto y a los derechos de las mujeres.

Meses atrás salí de fiesta con los colegas y amigos del trabajo, esa semana me había enterado de una embarrada de un tipo que me estaba cayendo, pero igual el tipo nada que ver… No tengo afán y adoro mi soltería me da mucha independencia y puedo hacer muchos planes y todos a mi gusto. Esa noche bailé un resto -me encanta bailar-, nos tomamos también nuestros tragos y en esas bailando y tomando me rumbié con un amigo del trabajo, para ser sincera no me gustó, él nunca me había gustado y pues yo le dije que nada, que él era mi amigo y que solo fue un beso y solo fue esa noche, que no quería que se complicaran las cosas, fue un poco difícil porque no quieres “herir” los sentimientos de tu “amigo”, no es fácil decirle que a veces pasan este tipo de cosas, y que la verdad no me gusta y nunca lo vi ni lo veré como algo más.

Lo crees superado, pasan semanas, meses y siguen siendo “amigos”. Y bueno, con tus amigos sales de vez en cuando, sales a cenar, a tomar café y también sales a rumbear, ese día tomé menos y cuando iba para mi casa, por elementos de solidaridad-seguridad él me acompañó hasta mi casa. Pero ¡error! Olvidé decirle al  taxista: “son 2 carreras”. El taxista dijo; “lo siento, ya tomé  otra carrera cercana, si la anulo me sancionan con  tiempo y no podría tomar otra carrera en los próximos N minutos”.

Somos amigos ¿no? Puede seguir y llamar un taxi desde tu casa.

1er punto: no hay nadie en tu casa

2do punto: tú nunca coges un taxi, así que necesitas buscar el número telefónico

3er punto: empiezas a sentir una presencia incomoda cada vez más cercana  que te desconcierta, que no te deja llamar porque quiere que hablen, ¡pura mierd@$!. Solo quiere tener la oportunidad para besarte y es incapaz de darse cuenta que no le respondes mal porque supuestamente es “tu amigo”, lo tratas con suavidad, le explicas que TU NO QUIERES besarlo que NO te interesa él como hombre y la única respuesta que recibes es: -“Pero quítame, ¿O es que no tienes fuerza?” WTF!!!! (Evidentemente usaba su fuerza y evidentemente era superior a la mía… ¿le explico anatomia? a ver diferencias entre hombres - mujeres...)

4to punto: ¿Por qué es tan difícil aceptar un NO? ¿Por qué su ego de macho no le deja ser rechazado? ¿Acaso nuestras palabras se las lleva el viento en cuánto a una decisión sexual de querer y no querer? ¿Nos convertimos en un reto y un premio a su masculinidad? ¿Simplemente a las mujeres les gusta hacerse las difíciles? Es tal la incapacidad de este personaje que no percibe el rechazo y continúa con el acoso. Inmediatamente en mi mente desapareció la suavidad del trato con el SUPUESTO “amigo” el cual se convirtió inmediatamente en mi enemigo, se despertó mi alma de guerrera y empecé a pensar: Si se atreve a continuar sé dónde están los cuchillos, corro al citófono, a la puerta y grito por ayuda. Es tan asquerosamente detestable que cuando menos lo esperas se avalancha sobre ti y empieza a tocarte, cosa que definitivamente termina de asaltar tu dignidad y por fin en medio de tu respuesta agresiva él reacciona y se da cuenta que debe dejarte en paz. En menos de un brinco abres la puerta y logras que se vaya.

5to punto: Existen, algunos personajes, como éste, incapaces de entender que nosotras tenemos decisión sexual de estar o no estar con alguien, y que su necesidad de macho (de querer ser necesitado) lo enceguece. Que el hecho de que se hayan besado una vez, no le da un mínimo derecho sobre ti y sobre tu cuerpo.

6to punto: Antes de irse, te da una de las peores excusas posibles, pero que da muestra de su primitivo cerebro: -“Pero es que mis amigos lo hacen…” y también refleja lo recurrente de la práctica de cierto grupo de hombres, de su nivel de ignorancia en cuanto a igualdad y dignidad de género, que tratan a la mujer como objeto y sienten un 0% de respeto por nosotras y por nuestras decisiones.

Ojala pudiera dejar de verlo pero trabajo es trabajo. Cada vez que lo tengo en frente me genera repulsión aunque hayan pasado meses. Al comienzo no soportaba tenerlo ni a 1 m de distancia, ni que me hablara, le respondía con monosílabos y aun ahora solo le digo lo necesario. Siento completa indiferencia por ese personaje, me incomoda estar con él y ver lo falso que es, la cara- ¿o mascara?- que tiene con el resto del mundo, su falsa caballerosidad con el resto de mujeres porque su naturaleza es otra.

Solo quiero decir, que sentí un mínimo por ciento de lo que debe sentir una mujer que ha sido violada. Que a veces si es posible luchar y defender nuestra dignidad, como en mi caso, pero hay otras ocasiones en las que las condiciones no lo permiten y podemos ser violentadas. Este tipo de situaciones no deberían  ocurrir, pero suceden y deben ser denunciadas; no es de sentir vergüenza, es de lucharla, guerrearla, para que no le vuelva a pasar ni a mí, ni a ti ni a nadie más. TODO mi APOYO, TODO mi RESPETO para mujeres víctimas de todo tipo de agresión sexual, sicológica, física y verbal.

Recuerda, oda al libre albedrío, a no tener miedo de TOMAR DECISIONES, a tener la determinación para luchar, para RECHAZAR cuando es necesario, guardando la DIGNIDAD en nuestra cabeza para mantener la frente en alto.

Aclaratoria:

Porque tengo padre, hermanos, primos y verdaderos amigos sé que muchos hombres son correctos, la mayoría que he tenido la fortuna de conocer, pero la vida también  me mostró un par de estos individuos inicuos que también existen, y a los cuales es necesario rechazar, alejar y demostrar que NOSOTRAS no solamente “PODEMOS DECIDIR”, como si fuera algo opcional y etéreo ¡NO! nosotras tenemos el “PODER  DE DECISIÓN” y esto debe ser respetado.

Att. Angélica,

La que fue su “amiga”